Hay que reconocer, que cuando te dispones a tirar, en verano pasarás calor y en invierno, días de mucho frío. El entorno es precioso con esa mole de roca rojiza al frente, tan monumental que muy a menudo hace sentir pequeño a quien se pone frente a él.
Vista de las dianas desde los puestos de tiro.
Vista de las Dianas desde el exterior.
Vista de la cancha de tiro desde la Cafetería